La ruta escogida ayer fue la vila de Marvão en la frontera por Valencia de Alcántara, perteneciente al concejo de Portalegre, con motivo de la celebración de la Fiesta de la Castaña. Marvão es un reducto defensivo desde tiempos inmemoriales, es un gran peñasco que se alza con magestuosidad sobre las llanuras de estas tierras cercanas. es una plaza fortificada presidida pr su enorme castelo (castillo) formado por dos amplios recintos interconectados. Destaca en él su gran cisterna que abastecía esta fortificación militar. Desde esta fortaleza el paisaje se vuelve infinito a su alrededor; la vista se pierde contemplando sus contornos: la sierra de San Mamede, la calzada medieval de Portagem, Porto Espada Beira, Santo Antonio das Areias donde un pasado lejano lleno de historia antigua y moderna se puede reconstruir con sus vestigios. Toda una maravilla este sano lugar, tranquilo y reconfortante para espíritus plenos de soledad y de recogimiento. Su demografía alcanza acualmente los 180 vecinos. El lugar merece una nueva visita.

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