la lluvia huele a verano,
la luna desaparece
mirando el bosque.
Tú, sin embargo, sonríes
mientras la lluvia
descansa en las hojas de los árboles.
Y te pienso en tu sonrisa
y en tus sueños me meto,
y en ti, toda.
El lago de tu cuerpo
buceo, tus labios tañen mi piel.
Amada mía, el viento te canta,
se alza, vivo pájaro, de gozo
apasionado.
Cerca de ti, amada,
soy carne de goce en vela,
un vértigo, chorro de fuerza vivo,
en ti, estrella de nieve,
paloma de fuego, y en ti pienso
el sueño de tu sonrisa,
mientras
la lluvia
cae
sobre
mi.
©Antogar
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